La crisis producida por la llegada al Gobierno Nacional de un modelo neoliberal, la que es llevada a adelante por la Alianza Cambiemos, hizo caer a la industria editorial nacional en un clima de desasosiego, que produjo, en muchos casos, la disminución de su número de publicaciones. En otros sellos no llegaron ni a publicar los libros que ya tenían programados desde el año anterior. Dicha realidad, es el producto de varios factores. Como ser el avance de los grupos editoriales transnacionales, el alza de los costos en toda la cadena de producción y la disminución de los salarios de los trabajadores, que son quienes compran los libros.
La primera Feria de Editores se llevó a cabo en 2013 en la sede de FM La Tribu, de la cual participaron 15 editoriales chicas. Se buscaba dar a conocer sus publicaciones y crear un vínculo entre lectores y editores. Con el correr de los años, la actividad fue creciendo, dando a conocer que existía un vacío a ser llenado en cuanto a la difusión de los catálogos desarrollados por las denominadas editoriales independientes. Hay que destacar que, actividades similares, se han venido desarrollando a lo largo de todo el país, como las llamadas Feria del libro independiente (Flia) o Mercado negro (ECuNHI). En 2016, en la Feria de Editores realizada ese año, a las editoriales nacionales se sumaron las de otros países de Latinoamérica: Uruguay, Chile y México. En 2017, se agregan a la lista de países Brasil, Ecuador, Perú, Venezuela y España.
En 2018 se llevó a cabo la séptima Feria de Editores en la Ciudad Cultural Konex, en los días viernes 10, sábado 11 y domingo 12 de agosto. Esta contó con la participación de más de 250 editoriales de Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador y México. Entre las argentinas figuran: Tren en movimiento, Caballo negro, Loco rabia, Godot, Corregidor, Notanpuan, Caja negra, Alto pogo, Añosluz, Paisanita, Espacio Hudson, Entropía, Bajo la luna, Marea, Interzona, La bestia equilátera, Madreselva, La mariposa y la iguana, Crackup, Funesiana, Serapis, Cienvolando, Milena caserola, Maten al mensajero, Sudestada, Mansalva, Paradiso, Amauta & yaguar, Viajera, 27 pulqui, Adriana Hidalgo, Mil botellas, Gog y magog, Calibroscopio, El 8vo. loco, Gourmet musical y Blatt & Ríos. Entre las editoriales de otros países de Latinoamérica, mencionamos a Libros de la mujer rota y Punto y aparte de Chile; Libro del fuego de Venezuela; Editoriales independientes del Perú; Irrupciones y Yaugurú de Uruguay.
Asimismo, se realizaron charlas y talleres. Entre las primeras, se destacan la que se titula Literatura y deuda, en esta participaron Paula Tomassoni, Carlos Ríos, Omar Chauvié y María Pía López; y aquella que aparece bajo el título de Historietas y novelas gráficas. De las redes a las librerías, que contó con la participación de Paula Sosa Holt, Diego Agrimbau y Dante Ginevra. Entre los segundos, cabe mencionar al denominado Escritores y editoriales en crisis: mercado, políticas y contratos, que tuvo como invitados a Esther Cross, Alejandro Dujovne, Antonio Santa Ana y Mónica Herrero, más la moderación de Alejandra Zina (integrante de la Unión de Escritoras y Escritores). En la misma se buscó debatir acerca de las tensiones que se llevan a cabo en las etapas de producción del libro. Para esto, especialistas en las diversas áreas de la Industria Editorial reflexionaron sobre derechos de autor, relaciones contractuales, rol del Estado, circulación y mercado. Otro de los talleres que tuvo lugar en este importante evento, es el titulado Desarrollo de Audiencias para proyectos culturales, que intentó brindar herramientas y estrategias para hacer que cada proyecto cultural se transforme en un emprendimiento sustentable. Este fue dictado por Laura Taube, licenciada en Sociología (UBA). Se estima que la cantidad de espectadores rondó las 10 mil personas.